Por el desplome de la Línea 12 del Metro, donde murieron 26 personas, Morena amagó con solicitar el desafuero de Miguel Ángel Mancera para que el ahora senador responda ante la justicia, pero al final desistió.
Miguel Ángel Mancera recibió la Línea 12 cuando asumió la jefatura de Gobierno en diciembre de 2012. Para marzo de 2014 informó sobre deficiencias constructivas en la llamada Línea Dorada y los errores en el desarrollo de la obra, por lo que la detuvo para repararla; sin embargo, en 2017 el sismo dañó otro tramo y nuevamente la arregló, Jorge Gaviño era entonces el director del Metro.
Por esta serie de acciones, Morena acusó que Mancera es “responsable de negligencia criminal en relación al derrumbe de la estructura” e inició la petición para quitarle la inmunidad que le da su cargo como senador.
Esta solicitud, presentada por la diputada María de los Ángeles Huerta, dio pie a que en la Comisión Permanente del Congreso iniciara una discusión para repartir culpas.
Ayer durante toda la mañana, la oposición y Morena se acusaron mutuamente por la tragedia, inclusive los panistas exigieron la renuncia de Claudia Sheinbaum como jefa de Gobierno y de Marcelo Ebrard como titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores para no entorpecer las investigaciones.
Pero fue Ricardo Monreal quien pudo negociar con los grupos parlamentarios que la solicitud del desafuero de Mancera se desvaneciera. “Nosotros no debemos convertirnos en una tribuna de linchamiento ni de acusación, ni menos vamos a prender hogueras para quemar a personalidades públicas”, dijo.
Agregó que lo más conveniente es seguir los cauces institucionales y llamó a la Comisión a esperar los resultados de los peritajes en curso. “Es necesario esperar a que los dictámenes técnicos salgan a la luz y que sea la autoridad la que determine”, destacó.
Pocos minutos después de este cabildeo, Mancera se defendió. Reapareció tras una semana de ausencia para responder y solicitar a la Comisión Permanente que el exdirector del Sistema de Transporte Colectivo, Jorge Gaviño Ambriz, comparezca ante el Pleno.
“Yo no voy a repartir culpas, no voy a caer en esa dinámica, no voy a señalar a nadie y tampoco estamos eludiendo ningún tipo de responsabilidad (...) Lo que sí voy hacer, es estar aquí, estar pendiente, estar en la ciudad el mayor tiempo, no voy a ausentarme ni a estar distante, aquí estamos”, aseguró.
El antecesor de Claudia Sheinbaum al frente de la ciudad también esperará los peritajes. “Desde el primer momento dije que estaré atento a los dictámenes periciales y coadyuvaremos en todo lo que requieran las autoridades”.
Además, sugirió que Gaviño acuda al Pleno para compartir información de interés público respecto de las acciones de reparación de la Línea 12.
Al tiempo que esta discusión iniciada por Morena se apagaba, el PT denunció al exdirector del Metro por la posible construcción de los delitos de homicidio, lesiones y abandono del ejercicio público.
Gaviño se defendió y demandó que se deslinden responsabilidades, pero sin fabricar culpables. Incluso retó al canciller Marcelo Ebrard, quien construyó la Línea 12 cuando fue jefe de Gobierno, a debatir el origen del problema.
“(Ebrard) pida licencia o renuncie, sentémonos en la mesa ante los medios, analicemos el origen del problema, cómo se hizo el contrato, el fideicomiso, las operaciones financieras, cómo se construyó sin proyecto ejecutivo, cómo con prisas se sacrificó esa línea”, retó al exjefe de Gobierno, quien fuera el promotor de la L12.
La ronda de señalamientos fue criticada por Sheinbaum. “El compromiso es con la verdad y justicia, no debe entrar ningún asunto de politiquería ni hacerse un asunto electoral, en este caso los diputados, senadores tienen que estar en que se haga una investigación justa, transparente, que se llegue a la verdad y se sancione a los responsables”, dijo.